Especial Imperio: Batman y Robin

Título:Otra muerte en la familia
Escritor: Jose Luis Miranda   
Portada: Edgar Rocha
Fecha de publicación: Julio 2009

Otra vez la desgracia irrumpe en la familia del murciélago. Robin, Cazadora, Batgirl, Alfred, Oráculo, cuando acabe la noche uno de estos aliados de Batman dejará de respirar. ¿Llegará a tiempo Batman de impedirlo? No puedes perderte: Otra muerte en la familia.
Hice una promesa ante la tumba de mis padres: librar a esta ciudad de la maldad que les quitó la vida. Soy Bruce Wayne, filántropo multimillonario. De noche, los criminales, esos cobardes y supersticiosos, me llaman...
Batman creado por Bob Kane

Nota del Editor: Este fan-fic hay que leerlo después de Superman nº 19: Imperio III.

Parte I
Gotham City

La señal del murciélago se encendió. El poderoso foco, situado en el tejado del edificio de la comisaria central de Gotham, impregnaba de claridad a la noche proyectando un enorme murciélago capaz de ser visualizado desde casi todos los puntos de la ciudad. Los habitantes de Gotham sabían que era una llamada para Batman. Muchos miraban al cielo y sonreían. Era una inequívoca señal de que alguien se preocupaba por la ciudad.

Sin embargo, en aquella ocasión el murciélago tenía una intención malévola. La policía no había tenido nada que ver en su proyección. Era el Joker, el payaso del crimen, como le apodaba la prensa, quien emitía la luz. Probablemente el Joker sea el asesino en serie más peligroso de la historia de los EE. UU. No eran pocas las voces que abogaban por aplicarle la pena de muerte. El Joker, había reproducido el proyector de la policía hasta el más mínimo detalle y lo situó en un edificio aledaño. De tal forma, que Batman creería, sin duda, que la señal provendría del edificio policial hasta que estuviera bastante cerca. No le cabía duda al Joker que, en cuanto estuviera llegando, percibiría la diferencia y tomaría precauciones. Pero, nada de eso le importaba. La Bat-señal era un cebo para alejar a Batman del verdadero objetivo.

Y es que el Joker se encontraba al otro extremo de la ciudad en donde había puesto otra trampa a los ayudantes del murciélago: Robin, Batgirl y la Cazadora. Un soplón policial que pasaba informaciones a los héroes enmascarados, había citado por separado a los tres vigilantes. Buck Smith, que era el nombre del confidente, apreciaba de veras a Robin y cuando el Joker le propuso participar en la trampa su primera respuesta fue una negativa. Sin embargo, la visión del Joker clavando una navaja en el globo ocular de una prostituta, por el simple hecho de pasar por el callejón, y la promesa de que lo mismo le pasaría a sus dos hijos, hizo que Smith cambiara por completo de opinión.

Parte II

Una triste farola era la única iluminación del sucio callejón. Buck estaba fumando nervioso apoyado en el muro. Robin fue el primero en llegar. Su moto frenó en seco frente al confidente. Robin le apreció sudoroso, nervioso y se intranquilizó. Se acercó a preguntarle el motivo de la llamada, cuando a su lado en sendos saltos se plantaron Batgirl y la Cazadora. La primera, Cassandra Cain, una de las mejores luchadoras de artes marciales del mundo. La segunda, Helena Bertinelli, una justiciera inmisericorde con la mafia. La Cazadora expresó el sentimientos de todos:

- Pero, ¿qué hacéis vosotros aquí? ¿También os ha citado Buck?

- Sí, dijo Robin. Mientras Batgirl asentía con la cabeza.

Robin avanzó hacia Buck y le preguntó:

- Bien, espero que sea algo importante.

- Lo es. Al menos para ti. Dijo una voz a su espalda.

Robin la reconoció al instante. Se giró sacando su barra de combate. Adoptó una posición defensiva y pulsó en su cinturón un avisador que conectaba con el cinturón de Batman. La voz volvió a hablar:

- Se trata de tu muerte.

- ¡Joker!- exclamo Robin.

- Vaya, lo adivinaste. Se nota que te ha entrenado el mejor detective del mundo. La próxima vez me disfrazaré de monja a ver si puedo pasar desapercibido.- dijo con ironía el criminal. Bueno, no es preciso que os diga a los tres que al estar vestidos de esta guisa estáis incumpliendo el mandato presidencial que prohibe las actividades superheroicas sin registro. Así que estoy plenamente legitimado para deteneros. Como estoy seguro que vais a resistiros al arresto, he traído unos cuantos ayudantes. Chicos, cuando queráis.

De las sombras emergieron terribles enemigos: Killer Croc, el hombre cocodrilo, con una fuerza sobrehumana capaz de partir a un hombre en dos; la KGBestia, Anatoly Kniazev, un experto en combate de los tiempos en los que todavía existía la U.R.S.S.; Lady Siva, Sandra Woosan, quizá la mayor experta en lucha del planeta y Deadshot, Floyd Lawton, posiblemente el hombre con mayor punteria con armas de fuego. Los contrincantes estaban elegidos. Antes de que los héroes pudieran reaccionar Croc y KGBestia se dirigieron hacia Robin, Deadshot empezó a disparar contra la Cazadora, obligándola a retroceder y a alejarse del grupo, y Lady Shiva se precipitó hacia Batgirl para librar un combate personal.

Parte III

Robin ya se había enfrentado a Croc y a la KGBestia por separado. Sabía que no podría con los dos a la vez. Por lo tanto, su única solución era la de la huída. Primero, volvió a pulsar el avisador que le indicaría a su mentor donde se encontraba. Y, luego, lanzó su bat-cuerda al tejado más alto para balancearse y sobrepasar en varios metros las cabezas de los villanos. La KGBestia también reaccionó con celeridad. Disparó, con excelente puntería, al enganche de la cuerda y Robin se precipitó hacia el callejón. El ayudante de Batman consiguió frenar su caída con su bastón de combate, utilizándolo para clavarlo en una ventana y parar la inercia un poco. Aterrizó con gracia frente a Croc y la KGBestia que se dirigieron a por él.

Robin esquivó la primera acometida. Se concentró y pensó en el entrenamiento de Batman. Le había preparado para luchar contra enemigos que le superaran en número y fuerza. Recuerda una regla básica, sonaba la voz de Bruce en su cabeza. Que no te toquen. No busques un enfrentamiento directo, son más fuertes, golpea y aléjate y esquiva, esquiva, cánsalos, muévete, alejándote hacia la via de salida más cercana, una ventana, una puerta, el fondo de un callejón, un agujero. Así que Robin intentaba con dificultad que los rapídisimos golpes de Croc y la KGBestia no le tocaran. Sólo le ayudaba el hecho de que no estaban coordinados entre sí y se entorpecían en el ataque. El ansia de ser los primeros en agredirle aumentaba su desincronización. Robin sacó dos batarangs y los lanzó al brazo de la KGBestia clavándoselos y haciendo que se detuviera unos instantes. Esto no fue beneficioso, Croc al estar solo redobló sus ataques siendo más rápidos y mortíferos. Desgarró la capa de Robin, en una acrobacia de éste saltándole por encima de la cabeza y la agarró en la segunda ocasión. El mecanismo de desenganche funcionó y la capa se soltó. Robin pegó con todas sus fuerzas en la nariz de Croc sin que apreciara la más mínima contusión. Saltó hacia atrás esquivando la acometida de la KGBestia que se estrelló con Croc.

En ese segundo, Robin miró al final del callejón y, sin dudar, echó a correr, como si el diablo le persiguiera. La KGBestia apuntó con su arma, pero Croc se interpuso: No, es mío. Croc salió tras Robin. Aunque Robin era rápido, cada zancada de Croc avanzaba el triple de lo que podía hacerlo el muchacho. Además, su velocidad fue inmensa como si se tratase de un cocodrilo en el agua a la hora de atacar la presa. Cuando la gruesa mano verde iba a alcanzar al héroe juvenil, éste frenó en seco echándose al suelo consiguiendo que Croc no le cogiera. Sacó unas bombas de humo del cinturon y las arrojó delante de Croc. La humareda se formaba impidiendo la vista. De repente, sonó un disparo. Provenía de un arma de la KGBestia. Su extraordinaria puntería había alcanzado al chico antes de que la niebla lo cubriera. El pecho de Robin pareció estallar cuando la bala golpeó en él. El chaleco de kevlar soportó el impacto salvando la vida del muchacho, pero la dureza del trallazo fue tal que Robin sintió como le faltaba el aire y perdía la consciencia. Croc comenzó a mover las manos a gran velocidad dispersando el humo. Atisbó un reflejo rojo que se arrastraba hacia el fondo del callejón y lo agarró en segundos. Levantó por una pierna a Robin, le arrancó el cinturon multiusos y le arrojó entre él y la KGBestia. Robin alzó la cabeza sólo para que una terrible patada le partiera el labio. La KGBestia y Croc empezaron a propinarle una paliza terrible. Mientras que el Joker bailaba y cantaba alrededor de los golpetazos sanguinarios.

Parte IV

La Cazadora no tuvo la más mínima opción. Aunque enarboló su ballesta mientras saltaba hacia atrás para intentar ensartar a su enemigo, su arma quedó destrozada por un disparo del villano. Si hubiese estado cerca de Deadshot quizá hubiera tenido alguna posibilidad en un cuerpo a cuerpo. Pero, con metros de distancia, Deadshot tenía la sartén totalmente cogida por el mango. Cada disparo del malvado desarmaba brutalmente a su adversaria. Así, perdió dos dagas, tres shuriken y sus flechas. Cazadora se sintió acorralada dio media vuelta e intentó huir. Deadshot se detuvo viendo como corría desesperada hacia la salida de la callejuela. Se alzó un poco la máscara dejando la boca al descubiertoy se colocó un cigarrillo en ella. Lo encendió sin perder de vista la carrera de la Cazadora. Introdujo en su arma de muñeca un afilado y delgado pincho de acero. Levantó el brazó y disparó. El pincho ensartó a la Cazadora en el antebrazo. La velocidad fue tal que, sin salirse del brazo de la chica, se clavó en la pared de ladrillo dejándola colgada como una percha.

- Aggg. Dios…

La Cazadora hizo acopio de todas sus fuerzas con la otra mano. Tiró con rabia para intentar arrancar el acero de la pared. El brazo le dolía horriblemente. El hueso estaba fracturado. Deadshot realizó la misma operación. Volvió a introducir otro pincho de acero y lo disparó atravesando la tibia y dejando la pierna igualmente clavada a la pared. La Cazadora aulló de dolor. Ahora no podía casi moverse. Empezó a llorar. Tiraba infructuosamente, pero su pierna izquierda y su brazo derecho no se despegaban del muro. Su enemigo se acercaba tranquilo, como si estuviese de paseo. Deadshot se puso a tres metros y le habló:

- Ha sido un placer preciosa.

- Por favor… te lo suplico… no lo hagas.

Acto seguido, el tercer pincho que tenía preparado salió despedido al brazo que le quedaba por clavar y atravesando su muñeca hizo de Helena una crucificada pagana. La Cazadora perdió el sentido por el dolor y quedó colgada del muro sin vida.

Parte V

En la última pelea, Batgirl y Lady Shiva se miraban a los ojos. Batgirl no podía distraer su atención de Shiva. Cualquier pequeño descuido podría terminar con su vida. Se enfrentaba a la mejor luchadora de la Tierra. Shiva se dirigió a su rival:

- Ya nos hemos enfrentado antes. Ahora es el momento de demostrar que soy la mejor.

El silencio fue la única respuesta de Batgirl.

- Eso es lo que más me gusta de enfrentarme contigo. No hay palabras innecesarias.

Entonces comenzó una danza de artes marciales. Una macabra y sangrienta danza en el que el más ínfimo paso en falso acabaría con la dolorosa derrota de una de ellas. Los movimientos se sucedían. Las dos rivales empleaban las artes más ocultas, las llaves más desconocidas, los movimientos más mortales y rápidos. Batgirl sintió que algo fallaba. Shiva se empezaba a mostrar superior, había sobrepasado su guardia en dos ocasiones casi con un resultado fatal. Batgirl empezó a imitar los movimientos de lucha de Batman. Pero, Shiva rió. Estaba mejor preparada. Sabía que hoy era el combate de su vida y le faltaba poco para imponerse a Batgirl.

Uno de los gritos de La Cazadora distrajo un segundo a Batgirl que miró hacia Helena y la vio clavada al muro. Shiva no necesitaba más. En un rápido giro penetró en la guardia de Batgirl y le partió el brazo derecho. A partir de ahí, fue coser y cantar. Aunque Batgirl era una luchadora como pocas, Shiva era mejor y con aquella ventaja no existía la más mínima duda de quién iba a salir triunfante. El combate se convirtió en pocos minutos en un monólogo de Shiva aplastando a su rival. Cuando Batgirl quedó sin sentido, Shiva hizo una reverencia a la caída en señal de respeto y la levantó en brazos dejándola al lado de donde yacía Robin.

Parte VI

Batgirl y Robin sangraban inconscientes mientras que Cazadora seguía colgando del muro. Siguen vivos dijo la KGBestia. Es el momento de corregir esto.

- Los quiero así. Habló el Joker. El murciélago no tardará en venir. Se trata de hacerle daño no de dejarnos sin diversión. Es el momento de irnos. Croc y KGBestia ya sabéis quién es el próximo objetivo: una dama que no para de dar información al murciélago llamada Oráculo.

Diciendo esto Croc y la KGBestia se fundieron con las sombras dirigiéndose al escondite de Oráculo. Shiva se giró hacia el Joker diciendo:

- He cumplido el encargo de tu presidente Luthor. Además, he demostrado lo que quería, que soy la mejor. No tengo nada más que hacer aquí. Batman no es mi rival en el de día de hoy. Ya me enfrentaré a él en otros términos.

Deadshot también habló con el Joker:

- No lo entiendo. Se supone que tenemos el encargo de acabar con el murciélago. Sólo hay que esperar y cuando vea a sus amigos así, perderá toda precaución. Mientras desclava del muro a la Cazadora le mataremos.

- Pero, ¿crees que he montado todo este show para matar a Batman por la espalda?

- ¿A qué cojones crees que hemos venido, puto chiflado?

- Hemos venido a jugar y el juego acaba de empezar. Esto le martirizará y la segunda parte del plan...

- ¿Segunda parte? Estás loco.

- Querido Deadshot… el Joker tocó un botón de su chaqueta y la flor que llevaba en la misma soltó un chorro de ácido que casi alcanza a Deadshot. El cual tuvo que lanzarse hacia atrás. … si vuelves a llamarme loco te mato.

- Creo que es hora de separar nuestros caminos, payaso. Veremos quien mata a Batman antes.

Diciendo esto se subió a una moto que tenía preparada y salió a toda velocidad. Dejando a un enrabietado Joker que no paraba de hablar solo:

- Idiota, inepto. No sabe que asesinar es un arte. Él sólo es de los de pim, pam, pum, apunta y fuego al culo del abuelo. Bah. Imbécil sin gusto. Batman sufrirá y luego morirá. Su muerte tiene que ser una obra maestra del arte del crimen, no una simple y traicionera encerrona. Además, cuando muera necesito que este Robin viva. – señaló a Tim en el suelo. Alguien tiene que tratar de vengar la muerte del mentor y dar continuidad al juego. Es así de sencillo. Bueno, es hora de largarse.

El soplón policial Buck Smith estaba atemorizado. Acurrucado en un rincón no había tenido valor para moverse y desaparecer de allí. El Joker le miró, le sonrió y le disparó un cargador entero. Se acercó al cadáver, se masturbó sobre él y desapareció murmurando:

- Ahh, me siento mucho mejor.

Parte VII

Batman aterrizó en el tejado del falso proyector cuando recibió la señal de Robin. Se giró aunque escuchó un clic que le puso en alerta. Saltó del tejado justo cuando el proyector explosionaba convirtiéndose en una bomba que arrasó el tejado e incendió los pisos más altos del edificio. La pierna derecha de Batman se vio bañada por esquirlas de piedra que desgarraron el traje y le produjeron heridas superficiales. Aunque atontado por la explosión llamó a los bomberos. Iba a irse, cuando escuchó gritos de las personas que habitaban en el último piso. La terrible explosión les habría despertado y estaban viendo como el fuego empezaba a invadir sus casas. Eran cuatro ventanas. Se asomó a la primera y vio como todos ya la habían abandonado. En la segunda lo estaban haciendo. En la tercera, una pareja de ancianos estaba desmayada en el suelo y sus nietos, al parecer dormían allí, no eran capaces de despertarlos. Batman entró y los levantó sacándolos al pasillo. Les reanimó y pasó a la cuarta casa para ayudar a otra anciana en silla de ruedas a desalojar la vivienda. Después, agarró el extintor del pasilllo y lo vació contra el fuego. Igualmente, arrojó un par de pastillas de espuma apagafuegos que llevaba en su cinturón. Entonces, escuchó las sirenas de los bomberos y abandonó el lugar dirigiéndose hacia donde se encontraba Robin.

Parte VIII

El Batmóvil rugía a toda velocidad. La señal era de máxima gravedad. Supuso que el falso proyector había sido una simple maniobra de distracción. En la pantalla del Batmóvil recibía una llamada de Nigthwing:

- Nos han atacado… Wilson y muchos otros… ten cuidado lo harán contigo… Prepárate… te atacarán. Llama a Tim y a Bárbara… Pueden estar en peligro.

El coche irrumpió en el callejón a toda velocidad. Batman esperaba una emboscada y preparó las armas de fuego que portaba el Batmóvil. Nunca hubiera esperado el atroz panorama. Marcó el teléfono de la mansión Wayne. Alfred, te necesito. Ven aquí con Leslie. Lo antes posible. Se bajó a toda velocidad. Desclavó de la pared a Helena comprobando que estaba sin vida. Había perdido muchísima sangre. Su piel estaba fría, llevaba muchos minutos muerta. La cubrió con la capa. ¿Qué malnacido habrá hecho esto? Sus sentidos se volcaron en los muchachos del fondo del callejón. Se apresuró a acercarse a Batgirl y Robin. Ella respiraba, él no. Pero su cuerpo aún estaba cálido. Le tumbó boca arriba y le hizo el boca a boca y el masaje cardiopulmonar sin pausa. Vamos, vamos, Tim. Sal de esto. Se dio cuenta de que tenía varias costillas rotas, pero tenía que conseguir que retornase su pulso. De repente, la señal del cinturón resplandeció. Se trataba de Oráculo. Ahora no. Estaba pidiéndole ayuda. La atacaban. Dios mío. No podía parar. Debía seguir con el masaje cardiaco si quería que Robin tuviese una esperanza. No respira. Batman seguía insistiendo sin cesar. No tiene pulso. Mantuvo la asistencia dos minutos. No respira. Dios mío ayúdame. No pares Bruce, no pares. La llamada de Bárbara seguía insistente. Venga, Tim, venga. No me dejes. Robin, otra vez, no. Los minutos se hicieron eternos. Por fin, una tos débil surgió de los labios del chico. Gracias al cielo. Gracias. Su corazón volvía a latir. Pero, ¿cuánto tiempo habría estado sin aire? Podría tener daños irreversibles en el cerebro. La señal de Oráculo seguía pidiendo ayuda. Aguanta Bárbara, aguanta ya voy, dame unos segundos. Fue al Batmóvil a por vendas en el momento en que aparecieron en el mismo coche Alfred.y Leslie. Batman gritó:

- Debo irme. Haced lo que sea necesario para salvarlos. No importan sus identidades.

Batman montó de nuevo en el Batmóvil y se lanzó a la carrera. Tenía que llegar lo antes posible al escondite de Oráculo y evitar lo que no había podido hacer en el Callejón del Crimen.

Parte IX

Los dos enemigos, Croc y la KGBestia, ya habían llegado a la estancia de Oráculo. Sólo les separaba de ella una puerta blindada. Bárbara Gordon estaba sentada en su silla de ruedas frente a todos los ordenadores que utilizaba en su trabajo diario, dar información a multitud de superhéroes. Había creado una red de información a la que recurría la mismísima Liga de la Justicia. Los villanos habían destruído el generador principal. La KGBestia situó un aparato que anulaba las señales al exterior. Por tanto, la señal que Oráculo mandaba a Batman se extinguió. Antes de llegar a la sala principal los dos villanos se habían retrasado debido a las trampas que la rodeaban. En teoría, tiempo suficiente para que el Caballero Nocturno la rescatara. Sin embargo, Batman no llegaba.

Croc golpeó la puerta blindada varias veces haciéndola temblar. La KGBestia le pidió que se separara y situó un explosivo en el marco. Bárbara enarboló una pistola, sabiendo que no sería suficiente contra los dos rivales. El explosivo estalló, pero la puerta no se desprendió de la pared. Mierda, murmuró la KGBestia. Croc le dijo: yo me encargo. Croc golpeó la puerta maciza y el sonido llenó de temor a Bárbara. Se veía totalmente indefensa. Cada golpe del hombre cocodrilo la llenaba de pavor. Batman no aparecía. Vaya momento para que esté con la Liga de la Justicia de misión en Apokolips, pensó irónica Bárbara. No puede ser, siempre me avisa de sus ausencias de Gotham. Bárbara se persignó, aunque hacía años que no rezaba. Se colocó en la pared más alejada a los terribles golpes. Y apuntó hacia la puerta esperando acribillar a balazos a lo primero que cruzara el umbral.

BOUM, BOUM.

Croc estrellaba sus poderosos puños contra la semi caída puerta.

BOUM, BOUM.

Croc no cesaba de golpear la puerta blindada.

BOUM, BOUM.

Bárbara miraba con ansiedad aquel marco a punto de reventar.

BOUM, BOUM.

Alzó la pistola.

BOUM.

La puerta cayó arrancada del muro con un estruendo terrible. El arma de Bárbara disparó dos veces. El primer proyectil chocó contra los nudillos de Croc sin hacerle casi daño. El segundo, en el pecho de la KGBestia, pero su chaleco de kevlar aguantó el impacto. Ya no pudo hacer más. Croc se abalanzó sobre ella arrancándole la pistola de las manos. Luego, la levantó, como si no pesara, y la arrojó por la ventana al vacío. Bárbara vio como su vida entera pasaba ante sus ojos. Su comienzo como la primera Batgirl, su amor por Dick Grayson, su tio James Gordon, el disparo que Joker le propinó dejándola paralítica, sus inicios como Oráculo… Cerró los ojos y se preparó para un choque que nunca se produjo al sostenerla Batman entre sus brazos:

- Joder. ¿Por qué has tardado tanto?- gritó Bárbara. Creo que voy a mudarme a Metrópolis. Al menos allí tienen supervelocidad.

- ¿Quiénes son?

- Croc y la Bestia.

- Peones.

Batman dejó a Bárbara en el suelo y se encaramó a la habitación donde los dos malvados acababan de presenciar el rescate. El hombre murciélago entró como un resorte y se puso frente a ellos.

- ¿Quién os ha enviado?

La Bestia habló:

- Estás incumpliendo un mandato presidencial. Tenemos una orden de arresto contra ti.

- Luthor. Bien, arrestadme. Habéis elegido un mal día.

El hombre cocodrilo se abalanzó hacia Batman tan rápido que no pudo esquivarle. Le agarró con fuerza y comenzó a aplastarle las costillas. Batman sintió como una se fracturaba. No tenía otra manera de soltarse que la de infringir un daño terrible a Croc. Con la mano izquierda asió como pudo un láser del cinturón y lo descargó a plena intensidad en el estómago del hombre lagarto. Éste ahuyó de dolor y soltó su presa. Al verse libre, Batman proyectó la misma arma al cuello logrando que Croc cayese al suelo gritando:

- Juegas sucio… hijo de puta. ¿Acaso no eres un hombre para luchar con las manos desnudas?

- Esto no es una competición deportiva. Imbécil. Estamos luchando a muerte. Ríndete o no saldrás vivo.

- Jamás, murciélago. Saldré de aquí con tu cuello entre mis dientes.

La KGBestia tomó el relevo rasgando la pierna del héroe enmascarado con un cuchillo. Batman tiró humo lacrimógeno y se puso una mascarilla. Croc sintió sus ojos irritados y buscó tomar una bocanada de aire en el pasillo. La KGBestia también se colocó una máscara anti-gas. Saltó hacia él y los dos se infringieron sus más duros golpes. Batman se ató la bat-cuerda al cinto y agarrando a la KGBestia consiguió que los dos cayesen por la ventana. Evidentemente, el héroe se aseguró que la había enganchado y quedó suspendido mientras la KGBestia se estrellaba contra un coche aparcado. El murciélago se balanceó sobre él y soltándose cayó con todo su peso sobre el vientre de la KGBestia partiéndole tres costillas en el impacto. Se giró esperando a Croc que, sin dudarlo, se precitaba al vacío para caer sobre él. Batman lo esquivó consiguiendo que se estrellara contra la KGBestia que, definitivamente, quedó sin sentido.
.
Croc se puso en pie. Hervía de rabia. De nuevo fue hacia el héroe de Gotham. Batman eludió un par de acometidas. En eso, llegó la policía. Unos treinta agentes acordonaban la zona apuntando al hombre cocodrilo. Cuando Croc se percató de todos los policías que le rodeaban. Gritó:

- ¡¡Trabajo para el gobierno, Estoy deteniendo al peligroso hombre murciélago!!

Al darle la espalda, Batman aprovechó para entrar en el Batmóvil y atropellar con fuerza a su enemigo al que dejó empotrado contra la pared de un edificio. Sin esperar a que algún policía recordara que tenía obligación de detenerle, se alejó del lugar en segundos. Croc estaba en las últimas. Se volvió a incorporar, mareado, dando tumbos. Intentó atacar a los policías que vaciaron sus cargadores sobre él sin piedad.

Parte X

Batman entraba en la mansión Wayne. Alfred y Leslie habían montado un improvisado hospital en la cueva en el que reposaban Batgirl y Robin:

- Amo Bruce, el señorito Tim vivirá… también la señorita Cain.

- ¿Helena…?

- No se pudo hacer nada, dijo Leslie. Llamamos a una ambulancia. No pudimos salvarla…

- Tim estuvo sin aire algún tiempo. ¿Podría tener secuelas?

- Es pronto para determinarlo. Su situación es estable.

Bruce se sentó ante el ordenador principal. Una señal roja anunció que alguien intentaba ponerse en contacto con él. Bruce dio paso a la llamada y su sorpresa fue inmensa al ver como la cara del Joker aparecía en el monitor.

- Te gusta mi nueva web cam. Me la ha regalado un amigo común. No te sorprendas que tenga tu número. Ahora juego en primera división. Esto ha sido divertido, pero sólo hemos empezado. Dale recuerdos a tus amigos…Robin, Cazadora, Oráculo y Batgirl… Me parece que lo han pasado mal.

- Hijo de puta. Si crees que esto va a salirte gratis…

- Bats… con lo que me estoy divirtiendo hasta pagaría por ello. ¿Sabes lo más divertido? Que encima estoy en el bando de los buenos. Je, je, je, je.

- No vas a ganar Joker.

- Je, je, je, je. Pase lo que pase, ¿acaso no lo he hecho ya? Ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja,ja.

El Joker cortó la conexión, aunque su risa continuó resonando en los pensamientos de Batman durante muchos minutos. Alfred se acercó y vio que tenía los ojos empapados de lágrimas. Ambos se fundieron en un abrazo. Batman se separó de su más antiguo amigo y le dijo:

- Alfred, quizá sólo haya una forma de detener al Joker para siempre.

- ¿No estará pensando…?

- Sí, en matarle.

- ¿No lo dirá en serio?

- No he hablado más en serio en toda mi vida.

Continúa en el Superman 20: Imperio IV.

2 comentarios :

  1. Menuda revolución. ES de los números que no te esperas. El Joker es un auténtico loco impredecible y nos encontramos con un Batman tan humano que casi no le reconozco (me encantaba el cabroncete que mostraba Morrison en la JLA).

    Aunque el final de la historia resulta lógico (y lo es tanto que hasta resulta obvio) solo me queda una pregunta: ¿Porque ha tardado tanto en darse cuenta?

    Me ha gustado mucho...

    ResponderEliminar
  2. Me gusto la historia, realmente interesante. :D el Guasón figura poco, para mi gusto, pero he quedado impactado con su actuación. El actor del fic ha llevado tanto a Batman, como a su nemesis a una etapa superior. Realmente este Guasón es un enemigo de tener en cuenta-

    ResponderEliminar