Escritor: Raúl Peribáñez
Portada: Juan Andrés Campos
Fecha de publicación: Octubre de 2007
Para convertirse en mejores héroes, estos adolescentes se han unido para aprender, entrenar y madurar. Son algo más que sólo ayudantes. Son la proxima generación de los mayores héroes del mundo. Son
Anteriormente en Los Titanes: Tras varias semanas ausentes el grupo vuelve a las andadas con nuevos miembros en sus filas. Aunque lo ignoran, Donna Troy está viva en algún lugar y Rose Wilson está colaborando con el villano Deathstroke, quien asegura que Cyborg es un peligro. De hecho, y para su sorpresa, Wonder Girl ha encontrado en su laboratorio el robot que provocó la muerte de Donna, así que sabe que hay algo raro en su compañero. Pero hasta que encuentre la respuesta a sus preguntas el problema más inmediato es la aparición de varias réplicas de los titanes procedentes de Mundo Bizarro. Wonder Girl, Superboy e Impulso están ahora allí… y éste último se ha convertido en un Bizarro.
- ¿Fue bien la entrevista, Gar? Espera, ¡taxi!
En el centro de New York la mañana estaba siendo una más, con nada a poder destacar. Pero entre sus viandantes destacaba sin duda una pareja de jóvenes. Ellos eran el verdoso Garfield Logan (Changeling) y su amiga, Bette Kane (Flamebird), que llamaba la atención por algo más que el color de su piel.
- ¿Fue bien la entrevista, Gar? Espera, ¡taxi!- ¿Qué demonios hay que hacer en esta ciudad para conseguir un taxi?
- Me sorprende que aún no haya parado ninguno con esa minifalda que llevas –sonrió Gar-. ¿Qué me preguntabas? Ah, sí. El casting era para interpretar al prota de una serie de adolescentes… Pensaba que daría el pego, pero al reconocerme me ofrecieron hacer de perro.
- ¡Taxi! –y por fin paró uno- ¿De perro?
- Sí, al parecer el perro va a tener un gran papel en la serie.
- Vaya, lo siento. No te preocupes, seguro que pronto encuentras un papel de humano –sonrió.
- Oigan, ustedes dos son titanes, ¿verdad? –preguntó el taxista
- Euh, ¿y cómo lo ha adivinado?
- Hombre, no me fastidien, ¡usted es verde! Solo puede ser Changeling o la Bestia o se llame ahora. ¿Adónde les llevo, a la zona portuaria para ir a la Isla de los Titanes?
- Pues la verdad es que sí –respondió Gar-. Jo, antes las identidades secretas solían ser más efectivas. Supongo que cuando media ciudad está pendiente del regreso de los Titanes cuesta mantenerlas…
- Cariño, y más aún si no usas máscara.
- Sabes, cuando era crío llevaba una. La dejé porque me picaba.
- ¡Oigan! Pues si son titanes, ¿no deberían prestarle atención a esa de ahí? –dijo el taxi mientras señalaba a una mujer que volaba.
Garfield bajó la ventanilla del taxi. Al comprender que podía haber algún problema se convirtió en un pájaro y salió volando. Se acercó a la chica voladora, y aunque a primera vista pensó que era Wonder Girl, pronto comprendió que había algo extraño en ella.
- Euh, ¿Wonder Girl? ¿Qué te ha pasado en la cara? Y en la piel ya puestos…
Mientras, en el taxi, Bette recibió una llamada por su intercomunicador:
- //Bette, soy Arsenal. Tenéis que acudir urgentemente a la Torre. Hemos sido atacados por dobles de otra dimensión.//
En ese momento Changeling impactó con fuerza con el taxi. El cuerpo héroe había quedado encajado en el morro del vehículo.
- ¡Dios, mi coche! –exclamó el taxista.
- ¡Garfield! No se preocupe, los Titanes le pagarán los gastos de reparación.
Bette salió del taxi para auxiliar a su compañero. Dio la vuelta y se encontró con su agresora, Wonder Bizarra, sonriendo mientras se acercaba paulatinamente hacia ellos.
- Bette… cof cof… pide ayuda – dijo el héroe como mejor pudo-…
La muchacha se echó las manos a los bolsillos de su chaqueta para buscar el mismo intercomunicador que había empleado hace unos instantes. “He debido dejarlo en el taxi” pensó.
- Bien, bien no me lo digas, tú eres una de las “dobles de otra dimensión”, ¿eh? No te acerques a mi amigo, blanquita, o te meteré una patada en el culo.
- Cof cof… no creo que enfadarla sea buena idea…
- Tranqui, Gar, sé manejar estas situaciones.
- Ey –dijo Wonder Bizarra-, yo te había reconocido. ¡Eres Flamebizarra!
La agresora se lanzó a abrazar a Bette de manera cariñosa, pero con más fuerza de la que uno esperaría.
- Agh, ¿ves, Gar? Lo tengo todo, agh, controlado.
Lejos de allí, en la isla, Arsenal y Starfire ayudaban a Cyborg a reponerse.
- Después de lo que pasó con Wonder Girl no esperaba entrar en combate tan pronto. Mi sistema informático no estaba en condiciones para una lucha –explicó Cyborg.
- ¿Por qué os peleasteis Cassandra y tú? – preguntó Starfire.
- Es una historia muy larga. Os la contaré encantado cuando hayamos solucionado el actual problema. Esas copias de Impulso y Wonder Girl abrieron un portal que absorbió a nuestros chicos.
- Hmm, sabemos que esos dobles vinieron de Mundo Bizarro, de otra dimensión. Y lo sabemos por él.
Arsenal señaló al segundo Superboy, quien también estaba allí presente después de haber pasado unas pruebas médicas en STAR Labs. Aunque oficialmente no era el líder de los Titanes mandar era parte de su carácter natural:
- Tenemos que comenzar a movernos: Wonder Bizarra y Bizpulso andan sueltos por la ciudad, y nuestros amigos pueden estar en peligro.
- ¿Pero cómo vamos a ir a Mundo Bizarro? Me cuesta imaginar que convenzamos a Bizpulso de que nos lleve allí.
Este Superboy había sido confundido al principio con un nuevo clon de Superman. Pero en realidad era otro doble de Mundo Bizarro, uno que se diferenciaba de sus dos amigos porque su intelecto había aumentado durante el viaje dimensional. Al principio se sintió incómodo con su nuevo estado, pero conforme fueron pasando los minutos comenzó a ver las cosas de otra forma.
- Creo que… no os hará falta Bizpulso. Él no es el único que puede romper la barrera dimensional.
- ¿Qué, quieres decir que puedes llevarnos hasta allí? –preguntaron los Titanes.
- No tan fácilmente como Bizpulso, pero sí. Me sabe mal todo lo que está pasando. Vuestros amigos no estarían en peligro si nosotros no hubiésemos venido. Pero tenéis que comprender que no voy a ir con vosotros.
- Chico, si realmente quieres ayudarnos tienes que acompañarnos; te necesitaremos para volver –dijo Cyborg.
- No lo entendéis. Ya no soy un Bizarro. Si vuelvo allí corro el riesgo de sufrir otro efecto secundario y que pierda mi inteligencia… Y, bueno, no os conté la verdadera razón por que abandonamos Mundo Bizarro. Mi gente ha sido exterminada, reducida a unos cientos. Allí las cosas no están bien desde que él llegó. Es por eso que huimos cuando descubrimos este mundo.
- ¿Él? –preguntó Starfire- ¿Quién es él?
- Nunca le he visto, pero le llaman Magus. Lo lamento, pero no quiero volver a casa.
- Quiero volver a casa.
Wonder Girl y Superboy caminaban por las calles de la que aparentemente era New York. Era muy similar a la ciudad que conocían, pero en Mundo Bizarro las cosas tenían un toque muy característico: la señalización de las calles estaba invertida, los carteles publicitarios motivaba en todo caso a no comprar el producto, etc. Pero además las calles estaban destrozadas, los edificio casi derruidos y ni tan siquiera había signos de vida. Parecía una ciudad fantasma.
- Yo tampoco quiero estar aquí, Cassie, pero tenemos que confiar en que los Titanes vengan a por nosotros.
- Yo de ti no lo haría.
- Vamos, son nuestra única esperanza. Tal vez Bart podría habernos traído de vuelta con sus poderes… Pero ahora es un bizarro y se largó a quien-sabe-donde. No podemos más que esperar. Sabes, me imaginaba este lugar con más duplicados de la gente de nuestro mundo…
- … pero en lugar de eso no hay absolutamente nadie, ¿eh? ¿Qué crees que ha podido pasar? Tiene pinta de que haya habido una guerra. En realidad no sería descabellado. Si todos sus habitantes eran tan alocados como Wonder Bizarra probablemente se mataron entre sí.
- ¿Has visto 28 días después? Tendremos que estar al tanto de no ser atacados por los zombis, bueno, bizarros. No sé por qué Bart ha cambiado, pero no pienso comenzar a hablar como esa panda de tarados.
De nuevo en nuestro mundo, en el centro de New York, los problemas continuaban entre Wonder Bizarra y la pareja de titanes.
- Tú no eres mi amiga Flamebizarra, ¿falso? –preguntó Wonder Bizarra mientras dejaba de abrazar a Bette.
- Euh, bueno, aún no hemos tenido tiempo de intimar, pero creo que podríamos llevarnos bien… ¿Qué te parece si vamos a tomar un café y hablamos como personas civilizadas?
- ¿Mmm? ¡No!
Sin poder hacer nada para evitarlo, Bette fue agarrada por el brazo y comenzó a notar que sus pies ya no estaban en tierra. Wonder Bizarra estaba volando y ella, su nueva “amiga”, no podía más que esperar que no la soltara.
- ¡Somos Jóvenes Bizarros, tenemos que salvar a la gente! ¡Mira allí abajo, dos hombres están en peligro!
- ¿Qué? ¡No, espera! Sólo han tenido un choque con sus coches… ¡No están en peligro!
Seguidamente descendieron hasta la posición de aquellos para sorpresa de cualquiera que pasara por allí en ese momento.
- ¡Estáis en peligro! – la bizarra cogió a uno de los dos y lo lanzó con fuerza a cientos de metros de distancia- Os he salvado, ¿eh?
- ¡Pero qué has hecho? ¡Lo has matado! –exclamó Bette.
- ¿Matado? Los he salvado apartándolos.
Bette sabía que no podría detenerla ella sola. Sin sus armas de Flamebird sólo era una humana corriente. Y sin su intercomunicador no podía solicitar la ayuda de sus compañeros. En el bolso encontró, eso sí, un marcador de señales. Lo activó notando la presencia de Wonder Bizarra tras ella.
- ¿A quién llamas, Flamebizarra?
- No… no llamo a nadie –dijo temerosa-…Sólo a unos amigos…
- Yo no soy tu amiga, Flamebizarra, así que no tienes que estar conmigo. Voy a dejarte que te vayas con ellos.
Su enemiga la cogió de nuevo para llevársela volando, provocando que se le cayese su marcador de señales.
- ¿De qué hablas, qué peligro?
- Magus. Ese es su nombre. Su poder supera en mucho al nuestro… No sabemos de dónde vino, pero cuando lo hizo comenzó a destruirlo todo. Masacró a todos los Bizarros como si no fuésemos nada.
- Esperad, los ordenadores están recibiendo una señal de auxilio –advirtió Cyborg-. Proviene del marcador de Bette.
- ¿Qué? He hablado antes con ella.
Arsenal puso el canal de noticias en uno de los monitores. Las primeras imágenes que aparecieron mostraban a Wonder Bizarra por las calles de New York.
- El marcador de señales se encuentra en la misma zona por la que ha pasado Wonder Bizarra –explicó Cyborg.
- Iré hasta allí volando –sugirió Starfire-. Bette puede estar en peligro, y con el T-Jet dañado yo soy la única que puede ir por aire.
- Si no te importa te acompañaré. También puedo volar y soy tan fuerte y rápido como vuestro Superboy.
Starfire hizo un gesto de aprobación y se marcharon al instante.
- Voy a estar en mi laboratorio reparando los problemas de mi sistema. Quiero estar a punto para cualquier cosa.
- Victor, antes de que te vayas: ¿por qué os peleasteis Wonder Girl y tú? Apenas la conozco, pero no la imagino como una chica problemática. Si eres el líder de los Titanes tienes que asumir ciertas…
- No quieras darme clases de compostura, Roy. No pasó nada que deba inquietarte.
- Confío en ti, pero esos chicos no. Con mentiras no te vas a ganar su respeto.
- Mira, Cassandra entró en mi laboratorio a través de uno de los accesos secretos. Asegura haber visto a Rose saliendo de allí.
- ¿Y es cierto?
- No he tenido tiempo de hablar con Rose ni de comprobar las cámaras de vigilancia. Cassandra dice que encontró en mi laboratorio el robot que mató a Donna…
- Hmm, recientemente lo han robado de STAR Labs.
- Lo sé. Me lo dijo ella. Cree que os estoy ocultando algo.
- De nuevo: ¿es cierto?
- Roy, amigo, nunca lo haría.
- Bajemos hasta allí –señaló Starfire desde las alturas.
- Pero las señales de vuestra amiga vienen de otra zona, ¿no?
- Cierto. Pero antes tenemos que saber de otro amigo.
En tierra estaba Changeling, lamentándose del dolor producido por el golpe. Al momento vio aparecer a su amiga titán.
- Ey, Kory.
- ¿Te encuentras bien, Gar? – preguntó Starfire- ¿Sabes algo de Bette?
- Se la llevó esa maníaca. No pude seguirla, lo siento.
- No te preocupes, ya estamos aquí. Habla con Arsenal y que te informe de la situación. Bette mandó una señal de auxilio que proviene a varias calles de aquí. Deja que te atienda la asistencia médica, nosotros nos ocuparemos de todo.
Starfire y el otro Superboy volvieron a emprender el vuelo.
- ¿Por qué te llamó Kory?
- Es una abreviatura de mi nombre tamarense: Koriand’r. Y es como me llaman mis amigos.
- Oh. Sabes, en mi mundo también teníamos identidades secretas… Pero todo era tan, euh, errático, que en el fondo nos daba igual.
- ¿Qué quieres decir?
- Sé que sonará extraño, pero creo que Mundo Bizarro es un reflejo de vuestro mundo y viceversa. Pasan las mismas cosas, sólo que de una manera distorsionada.
De nuevo volvieron a pisar tierra firme al detectar la señal enviada por Bette.
- Aquí está –dijo Starfire al ver en el suelo el marcador-. Bette estuvo aquí. ¿Pero dónde está ahora?
- Creo que lo sé. En mi mundo Wonder Bizarra y Flamebizarra eran buenas amigas, tal vez por eso se ha empeñado en llevarse a Bette. Conociéndola sólo ha podido ir a su lugar favorito: el puente Brooklyn.
- Por Gea, me encanta este puente.
En Mundo Bizarro Wonder Girl y Superboy estaban sentados en lo alto del puente, mirando la ciudad, grandiosa y grotesca por igual.
- ¿Habías estado antes en New York?
- Me crié en Gateway City, pero mi madre asistía a congresos y seminarios como experta en arqueóloga, así que vinimos en muchas ocasiones. Cuando Zeus me dio los poderes que me convirtieron en Wonder Girl hice una pequeña escapada para venir aquí. Pasé horas y horas volando desde Gateway hasta llegar. Me senté aquí mismo y miré la ciudad durante otras tantas. No podía creer cómo había cambiado mi vida. Ahora podía venir aquí cuando quisiera para relajarme, para pensar…
- ¿Y en qué piensas?
- Últimamente en que no merezco estos poderes.
- Ey, no digas eso.
- Cuando volvamos voy a dejar los Titanes. Me equivoqué viniendo. Me equivoqué queriendo ser Wonder Girl. No puedo reemplazar a Donna.
- Cassie, no puedes vivir eternamente a su sombra. No la conocí mucho, pero probablemente también ella sentía lo mismo hacia Wonder Woman. Y no por ello se rindió, ¿verdad?
Wonder Girl, melosa, abrazó a su compañero.
- Cuando te conocí me pareciste un capullo integral.
- ¿Y has cambiado de opinión?
- En realidad no, pero admito que puedes llegar a ser más sensible de que lo pensaba.
- Bueno, que quede entre nosotros –sonrió Superboy-. Sabes, tenías razón: la vista es genial.
En nuestro mundo…
- La vista es espantosa, ¿eh? –comentó Wonder Bizarra.
- Sobre todo contigo delante, sí. Vamos, lápida humana, no puedo contigo; si vas a matarme hazlo ya. A ver si te lo metes en la cabeza: no soy tu amiga ni voy a serlo nunca.
- ¿Por qué me dices eso? –la villana levantó a Bette por el cuello- Somos… amigas.
- No tienes ni idea de lo que es la amistad…
- Suéltala –dijo el nuevo Superboy al entrar en escena-. Wonder Bizarra, tienes que volver a Mundo Bizarro. Bizpulso y tú.
- Conner, amor…
Wonder Bizarra soltó a Bette, que gateó hasta Starfire escapando de su agresora.
- Pero eres distinto –la villana se acercó a Superboy, tocando su rostro-…
- Lo soy. Veo las cosas de otra forma. Tienes que comprender que aquí las cosas no son como en Mundo Bizarro.
- Yo… sólo quería tener amigos… Y tu amor.
Wonder Bizarra se acercó aún más a su compañero para besarle, pero éste se echó para atrás.
- En Mundo Bizarro te amaba, Cassie, pero ya no soy un bizarro. No podemos seguir juntos.
- ¡Sí! –la villana le propinó un duro golpe. Seguidamente lo agarró por la capa y lo tiró del puente- Y después os toca a vosotras –ahora se lanzó con fuerza hacia Bette tirándola también del puente.
Antes de que Starfire se lanzara a salvar a su compañera lo hizo Changeling, que apareció en ese momento con el aspecto de un halcón, agarrándola con sus patas.
- ¿Por qué no me dijiste nunca que te gustaba practicar el puenting? –sonrió.
- Gar, ¿de dónde has salido?
- Seguí a Kory hasta aquí. He tardado en venir, lo sé, lo sé, pero no me pidas más después de la paliza que me dio esa tiparraca.
Changeling descendió hasta pisar el asfalto del puente, momento en el que recuperó su forma humana.
- Tenemos que subir a ayudarles, Gar.
- De eso nada. Tú no vas a ningún lado. Y yo –Gar se desmayó entonces-…
- Vale, tú desde luego no vas a ningún lado. Y sin tus poderes cambiantes yo tampoco, me temo.
Mientras, en lo alto del puente, Wonder Bizarra y Starfire combatían. Para sorpresa de ésta apareció por su espalda Bizpulso, ausente hasta ahora, que la agarró para que su compañera pudiese golpearle. La joven de Tamaran comenzó a recibir repetidos golpes de su oponente hasta que reapareció Superboy.
- ¡Dejadla! – exclamó golpeando a súper velocidad a quienes fueron sus amigos-. ¿Te encuentras bien, Starfire? Los he noqueado. No creo que molesten durante un buen rato.
- Gracias. Pero, espera, ¿y Bette?
- Changeling la salvó. Están abajo.
Casi una hora después, en la isla de los Titanes…
- Lamento no poder acompañaros en esta aventura. La primera que tenemos en esta nueva etapa y yo me la pierdo –bromeó Changeling.
- Tranquilo, Gar, habrá otras. Además, ya has tenido bastante aventura por hoy. Lo mejor será que descanses. Y va lo mismo por ti, Bette –ordenó Arsenal.
- Vaaale, mamá. ¿Entonces os vais ya?
- Tan pronto como Superboy llegue a un nivel de velocidad por el que pueda romper la barrera dimensional. He hablado con Rose; ella se ocupará de recoger del colegio a Lian, así que no tenéis de qué preocuparos. Si pregunta por mí decidle que volveré pronto.
Mientras hablaban Superboy no paraba de dar vueltas sobre sí mismo a gran velocidad hasta que, por fin, a su lado, donde aparentemente no había nada, comenzó a formarse una grieta.
Arsenal, Cyborg y Starfire se acercaron a la grieta, llevando a cuestas a Wonder Bizarra y Bizpulso.
- ¿Qué vas a hacer, muchacho? ¿Vienes o te quedas? –preguntó Cyborg.
Superboy se quedó pensativo. No deseaba volver a Mundo Bizarro, pero después de dudar durante varios segundos cambió de opinión: - Alguien os tiene que hacer de guía, ¿no? – El muchacho dejó de moverse para seguidamente atravesar la grieta. Al instante ésta desapareció como si nunca hubiese estado allí.
En Mundo Bizarro, mientras, Wonder Girl y Superboy escucharon un poderoso sonido que les llamó la atención.- ¿Qué ha sido eso? –dijeron a la vez.
Pero antes de que pudiesen comprobar de qué se trataba Wonder Girl notó el frío filo de una espada rozando su garganta. Superboy se giró entonces viendo a quien empuñaba aquel arma, una mujer de larga cabellera negra, vestida de una manera peculiar y que sonreía mientras decía: - Ha pasado mucho tiempo, Cassandra.
Si le preguntasen su respuesta sería inmediata: “Me llamo Donna Troy”.
Continúa en el próximo número con la saga “El regreso de Donna Troy”.
TITANES UNIDOS
Séptima entrega de la serie y las cosas ya van tomando forma, aunque sea lentamente. A la acusación de Deathstroke de que Cyborg es un traidor se añade el misterio de por qué éste tiene en su laboratorio al robot del futuro que provocó la muerte de Donna, papeleo de los Protocolos Iron (¿seguís Outsiders?) y, para colmo, detiene a un robot que no para de decir “I-R-O-N”. A Wonder Girl no le hizo gracia descubrir todo esto y se metió en una buena tunda con su compañero cibernético. ¿Cómo reaccionarán el resto de titanes cuando se enteren? Además, hay que recordar que hace tiempo Cyborg estuvo a punto de provocar la destrucción de la Tierra… ¿Recordáis que en Los Titanes # 1 Batman decía que no se fiaba de él? En fin, aún tendréis que leer unos cuantos episodios para saber si Victor Stone es, o no, un traidor. Se admiten apuestas en nuestro foro.
Oh, y sí, por fin reaparece Donna Troy.
Raúl G. Peribáñez
Septiembre y Octubre de 2007
Buenas, la serie sin duda va ganando poco a poco. Sobretodo en cuanto a trama central se refiere. Los personajes en si y su relaciones es tan bastante bien llevados. Y en fin, aunque se ha hecho de rogar por fin la cosa se empieza a poner muy interesante, por un lado por el regreso de Donna, por otro por el asunto de Cyborg.
ResponderEliminarContinuo adelante!!! ^^